David, el primer puntaje nacional del Colegio Etchegoyen

Recuerdo cuando estaba en cuarto medio, en nuestro curso había un compañero súper piola, de esos que no hablaban nada y se lo pasaban estudiando, lo diferente que tenía nuestro compañero es que ya cursaba algunos ramos en la Universidad de Concepción, todos lo molestaban, pero no en mala, eran bromas en buena onda, por ejemplo que viviera la vida como un joven normal, que fuese a fiestas cosas por el estilo.

En los ensayos que hacíamos en el colegio, obviamente era el mejor pero nunca sacó los 850, nosotros a lo más llegábamos a los 600 puntos, pero él sacaba la cara por el curso, lo que más se recuerda de “Deivid” es lo tranquilo que era, no se enojaba por nada.

Ya era noviembre y todos nos comenzábamos a preocupar por la PSU, en el caso de nuestro compañero le importaban más los certámenes que tenía en la U, así que no le daba mucha importancia a la prueba, llegó el día de la PSU y al dar los resultados no nos pareció raro que David obtuviera los 850 puntos en la prueba de Matemáticas, era el primer alumno en la historia de nuestro colegio que obtenía el puntaje máximo, en el colegio hicieron la media ceremonia, le regalaron un notebook, un mp3, cuanto galardón se les ocurrió y él seguía tan tranquilo como siempre, también fue invitado a un desayuno en la Moneda pero no quiso ir.

En su primer año como mechón, David siguió igual en su forma de ser, ya sabía cómo funcionaba el tema de certámenes y la forma de estudio, así que estaba muy avanzado en comparación con sus compañeros que ingresaban por primer año, igualmente fue mechoneado por los de segundo, debió pasar por este tradicional ritual, que según el rememora no le causó molestia alguna, "Fue algo piola, tampoco se fueron al chancho conmigo, conocía a varios de los compañeros, tal vez eso me jugó a favor".

En lo académico fue un año bueno para él, pasó todos los ramos, siendo uno de los mejores alumnos, fue muy requerido por compañeros a la hora de estudiar, y el como lo era en el colegio tenía mucha paciencia a la hora de enseñar. A pesar de haber aprobado todas las clases con buenas notas una vez terminado el año académico decidió cambiarse de carrera a otra ingeniería. Hoy cursa su último año en la universidad, con la posibilidad de realizar un magister en otro país y siendo uno de los mejores alumnos de la carrera.