La vocación es un concepto importante al que se le debe dar el tiempo suficiente como para descubrir porque de él dependerá, en cierta forma, la elección de tu futura carrera. No es algo que se pueda forzar sino que más bien nace desde las ganas de hacer algo por otras personas a través de tu propio trabajo o carrera.
Si no hay vocación es muy difícil que puedas sacar adelante una carrera porque las ganas se pierden y el interés no es el mismo, si lo comparas con alguien a quien en verdad le gusta lo que estudia. Según la web de MiFuturo.cl la principal causa de la deserción de los estudiantes tiene que ver justamente con la vocación.
"Un estudio de Centro de Microdatos de la Universidad de Chile revela que entre quienes confiesan un problema de vocación, 35% cambió de carrera y de universidad, 15% se cambió de carrera en la misma universidad, 15% se retiró para preparar la PSU y rendirla nuevamente, y el 13% siguió la misma carrera pero en otra institución" asegura MiFuturo en una articulo publicado en su web.
Claramente no podemos hacer responsable a la vocación por la deserción de una carrera porque también pueden influir otros factores como el interés, las ganas, el nivel educacional con el que llegó el estudiante a la universidad o el mismo dinero que no alcanza para solventar el estudio. Pero no podemos negar que la vocación es importante como para decidir, en ciertos casos, el ingreso a la educación superior.
Es por lo anterior que es importante elegir bien una carrera que te llame más que la atención; te corresponda y te sientas cómodo o con la vocación suficiente para desarrollarla independiente de los ramos, campo laboral o remuneración. La vocación supone un llamado a estudiar y enseñar aquello que amas.