Mi querida amiga Gisselle es una flamante kinesióloga recién salida de la U. Fui testigo de todas sus horas de estudio así como también de todas las veces que quiso tirar la toalla. Pero a pesar de las penas y las bebidas energéticas, hoy por hoy mi amiguita puede decir con orgullo que es una profesional con todas sus letras. Fueron 5 años de esfuerzo que le dejaron grandes errores y grandes aciertos. ¿Quieres saber cuáles son? ¡Presta atención!
Errores
1. No aprovechar al máximo las clases prácticas
Según me cuenta, el primero de sus grandes errores como estudiante de Kinesiología fue decir “después lo estudio” o “en la casa lo veo”, pero el hecho es que todas las clases son prácticas y si no aprovechaste en el momento, si no grabaste o no viste cuando el profe hizo la maniobra perfecta para cierto procedimiento… ¡lo lamentarás! porque esa era LA oportunidad que tenías para verlo. ¡Aprovecha la base que te entregan en clases!
2. No preguntar más a los profesores
No haber preguntado más fue otro de sus grandes errores. La verdad es que de repente a uno le da paja preguntar porque le da miedo, y no pregunta no más. Lo importante es que no dejes que esto te pase. No se trata de hacer preguntas generales, sino de hacer preguntas puntuales: profe, ¿qué se hace en este caso? Se trata de preguntar al profesor cómo lo hace él, aprovechar de sacarle todos esos tips que te ayudarán a tener un mejor manejo en atención primaria. ¡No te quedes sólo con la materia teórica!
3. “Partir lento” en el internado
Finalmente, otro de los errores que vivió como estudiante de Kinesiología fue creer que estudiando “de a poquito”, que partiendo “piolita” en el internado, le iba a ir bien. ¡Mentira! Tienes que partir con todo al tiro, tienes que partir preguntando y si es posible adelantar materia antes de llegar. Lo ideal es que llegues con todo fresquito, porque así empiezas al tiro a agarrar práctica. En cambio, si llegas “cachando” primero y después te pones a estudiar, te perderás muchas cosas entremedio por poner atención a otras. ¡No lo hagas!
Aciertos
1. Realizar cursos complementarios
Gisselle me dice que uno de sus grandes aciertos como estudiante de Kinesiología fue empezar a hacer cursos antes de titularse. La verdad es que ¡es algo súper necesario! Ojalá desde el tercer año en adelante empieces a tomar cursos, porque además te cobran como estudiante y el costo baja considerablemente. Así después, cuando llegas al internado, ya tienes una base fuerte. Los cursos de Trauma son los más importantes, pero también hay de Masoterapia o de Primeros Auxilios que te sirven caleta.
2. Hacer un rotatorio por cada internado
Todos los internados que tomó fueron un acierto. Por ejemplo tomó UPC (Unidad de Pacientes Críticos) y vio de todo, lo que le ayudó a tener una idea real de cómo llega el paciente en los primeros estados y lo que realmente puedes hacer para ayudarlo. Tu prioridad debe ser elegir el área que quieres seguir después, aunque te digan que es el más difícil o que los profesores son los más pesados. Pero lo más importante, ¡haz un rotatorio por cada internado!
3. No complicarse con la tesis
Finalmente, otro de sus grandes aciertos fue no complicarse con la tesis. Con su compañera la terminaron en un año, versus algunos de sus compañeros que aún ahora siguen trabajando en ella. ¡Y ya van dos años! Su recomendación es no complicarte con el tema y no pretender salvar el mundo. Entiende cómo se hace una tesis y después, cuando te titules, puedes ser “Súper Kine”.
Aprovecha bien tus años en la universidad. Aprovecha a los profes y su experiencia, aprovecha los internados y ¡nunca pierdas tu humildad!