Mi experiencia en... una sala de clases

Nicole ingresó en 2008 a estudiar Pedagogía Diferencial en el Instituto Pedagógico de la Universidad de Chile, tomó el desafío de educar e ingresar a las aulas junto con niños que poseen capacidades diferentes. Si bien en un comienzo no era la profesión que quería estudiar, pero a medida que pasaba el tiempo se dio cuenta de la noble labor que desempeñaría. Durante los 5 años de estudio se dedicó por completo a aprender y prepararse con el único objetivo de poder entregar los conocimientos necesarios a los que ahora llama, sus niños y tienen el privilegio de contar con una profesora que obtuvo excelencia académica en su generación.

Conoce más a fondo la carrera de Pedagogía Diferencial e infórmate sobre su campo laboral y otros aspectos que serán necesarios al momento de tomar una decisión sobre tu futuro.

Nombre: Nicole Velásquez V.

Edad: 25 años

Profesión: Licenciatura en Educación y Pedagogía en Educación Diferencial (Profesora Diferencial)

1. ¿Por qué elegiste estudiar Pedagogía diferencial? ¿Siempre quisiste estudiarla o había otras opciones antes que ella?

Entré a estudiar Pedagogía Diferencial porque me gustaba la educación y pensaba que era una alternativa educativa a la educación convencional, así mismo siempre me gustó trabajar en grupos, entregando aprendizajes. Cuando vi el campo de la carrera, ofrecía ámbito de desenvolvimiento en comparación a otras pedagogías, porque podías trabajar en escuelas especiales y regulares, centros de apoyos, fundaciones... etc. Derribando el mito de la educadora en la escuela especial. Sin embargo, la carrera no era mi prioridad porque sentía muchas inquietudes, pero con el tiempo me di cuenta que puedes desarrollarte en cualquier aspecto desde la Educación Especial

2. Puedes explicarnos ¿En qué consiste la carrera, cuál es el campo laboral y cuánto dura?

La formación inicial dura 5 años, y sales con una especialidad. En mi caso, yo estudié educación especial con mención problemas de la visión en la UMCE, la que te permite trabajar con personas en situación de discapacidad visual, en distintos niveles: estimulación temprana, preescolares, básica, integración escolar, inclusión universitaria, asesoramiento en programas inclusivos y desarrollo de TICS, educación de adultos e inserción social de estas personas a la comunidad. La característica de esta mención en comparación de otras, es que solo la UMCE la dicta, y es muy poco lo realizado en el campo de la discapacidad visual, por lo que tienes muchas oportunidades para desarrollar tus ideas.

3. ¿En qué lugar realizaste tu práctica profesional, fue más de una? ¿Cómo fue la experiencia?

Mi práctica profesional la realicé en el Liceo José Victorino Lastarria, en la comuna de Providencia. Apoyando el programa de integración de chicos con discapacidad visual que asisten al liceo en enseñanza media. La experiencia fue muy significativa, porque trabajas con otros profesionales de pedagogía (profesores de química, física, filosofía... etc.) y aprendes de ellos, como así mismo ellos aprenden de ti, derribas mitos sobre la educación especial y lo más importante trabajas desde una perspectiva colaborativa, con distintos profesional de la educación, enriqueciendo tu desarrollo profesional.

4. ¿Dónde trabajas actualmente?

Actualmente trabajo en el programa de integración escolar a nivel básico, en la comuna de Puente Alto. Con niños con dificultades específicas del aprendizaje, discapacidad intelectual, déficitatencional... etc. Es decir, con la realidad educativa chilena.

5. ¿Con qué desafíos o situaciones complejas te has encontrado ya trabajando?

Entre los principales desafíos que se pueden observar en la comuna de Puente Alto, es el alto índice de vulnerabilidad que presentan los niños que asisten a las escuela municipales, por lo cual debes poner en práctica todo aprendido sobre las diversas teorías que abordan el aprendizaje. A pesar de la vulnerabilidad y desafíos que se presenten, los lazos que vas formando con los chicos, hacen que estos dificultades se conviertan en oportunidades de desarrollo profesional y personal. Luego te das cuenta que el trabajo en educación es muy complejo, porque no solo abordas los contenidos, sino que también el contexto de cada estudiante, lo cual hace gratificante cualquier logro obtenido por muy pequeño que sea.