Cómo la meditación ayuda a tu concentración

Si tienes problemas de concentración o de memoria y  te cuesta entender la materia de tu profesor entonces puedes probar con la meditación  para mejorar tu comprensión. Si no quieres intoxicar tu cuerpo con medicamentos que puedes comprar en la farmacia, entonces puedes mejorar tu capacidad mental a través de la simple abstracción del pensamiento.

Además de ayudar a eliminar el estrés, la depresión, ansiedad, el dolor e insomnio la práctica constante de la meditación puede aumentar la capacidad de quien lo practica para poner atención incrementando incluso su calidad de vida. 

La neuroplasticidad del cerebro permite modificarse a si mismo. Con esta idea la meditación permite al cerebro auto mejorarse ya que se adapta a tus actividades de mejor manera. Este concepto puede que suene un poco científico pero la realidad es que es el nombre que se le da a la función que tiene el cerebro para generar nuevas conexiones nerviosas  en relación a la información  que se puede dar a través de la estimulación sensorial. Claro,la meditación consta de estar en contacto con tu cuerpo aumentando la capacidad receptiva a la hora de procesar información. Con estos datos el cerebro crea nuevas redes neuronales mejorando su capacidad.

 La abstracción y relajo de la meditación realizado con bastante continuidad puede cambiar la estructura del cerebro reduciendo el deterioro del mismo. Esta idea fue confirmada por la Doctora Sara Lazar quien en su conferencia de TEDXCambridge aseguró los beneficios del yoga para tus capacidades mentales.

La reestructuración cognitiva de la meditación permite que la mente sea más rápida y sencilla. Según un estudio realizado por científicos de la Universidad de Carolina del Norte de Charlotte (UNCC) reveló que la abstracción de la meditación permite modificar tu cerebro. El experimento demostró que las personas que meditaban solo 20 minutos durante 4 días demostraban un gran aumento de su capacidades cerebrales en comparación al grupo de control (aquellos que no realizaron la meditación).  

El ejercicio consistía en que los participantes debía estar relajados con los ojos cerrados centrando su atención, al mismo tiempo, en sus respiraciones. Si llegaba alguna idea no debían desarrollarla ya que solo debían concentrarse otra vez en la respiración. 

Ahora sabes que la meditación puede ser buena fuente para mejorar tu concentración y memoria a través de la práctica sana que ayuda a conectar tu cuerpo con tu mente.

Imagen CC mariapeque