Ganándole a la PSU: Tips de supervivencia para la prueba

No hay nada más estresante que todo el mundo te diga -constantemente- cuán importante es la PSU para tu vida como estudiante. Incluso te miran desafiantes. No puedes fallar, ya que esta prueba no sólo mide tus conocimientos, sino que definirá tu vida y bla, bla...

Lo único que importa es que no debes dejar que estos comentarios muevan tu vida, es necesario que te tomes este proceso de la manera más calmada posible porque los nervios muchas veces te traicionan.

Es por esto que a continuación te dejamos 9 tips para sobrellevar el proceso de esta prueba:

1.- Elegir un lugar de estudio adecuado

Muchos tenemos una mente muy dispersa y todo a nuestro alrededor nos distrae. Es por esto que es necesario elegir un buen lugar para ponernos las pilas.

Nuestro pequeño espacio debe estar lejos de la televisión y ojalá no incluir un PC para evitar tentaciones como Facebook, Twitter o Tumblr. Además, tu lugar de estudio debe contar con la iluminación adecuada y obviamente lejos de todo ruido, debemos estar lejos de cualquier distracción.

Si crees que no puedes lograr esto en tu casa, puedes ir a alguna biblioteca o algún otro sitio público en donde te sientas cómodo o donde creas que puedes concentrarte de manera más fácil.

2.- Prepararse con meses de anticipación

Es recomendable que comiences a estudiar para La Prueba con meses de anticipación, incluso puedes inscribirte en un preuniversitario si sientes que con lo aprendido en el liceo no basta.

No te relajes al extremo de tomar los ensayos una semana antes de rendir la PSU, ya que lo único que conseguirás es aumentar tus miedos y dudas. Lo que no aprendiste en cuatro años difícilmente lo entenderás en sólo días de estudio.

3.- Jornadas de estudio grupales

Es recomendable -primero- estudiar solo para que puedas reconocer en qué materias eres bueno y en cuáles tienes más problemas o necesitas ayuda.

Esto no quiere decir que te transformes en un ermitaño, para nada. Puedes reunirte con tus compañeros de curso o amigos, idealmente una vez por semana, para que todos juntos puedan repasar los contenidos de las pruebas.

Estas instancias son fundamentales para intercambiar dudas, las que pueden responder entre ustedes o bien pueden consultarlas a los profesores correspondientes.

4.- Asistir a ensayos de la PSU

Junto con descargar y hacer los ensayos de la PSU para repasar las materias, es importante que te informes sobre dónde se realizan estos de manera presencial y qué es necesario hacer para asistir a uno.

¿Por qué es importante? Porque comienzas a familiarizarte con el proceso junto con las cosas que debes o no puedes hacer cuando asistes a la prueba. Es una suerte de preparación, ya que no se trata sólo de rellenar círculos con tu lápiz mina número 2.

5.- Evita los trasnoches, dormir bien nunca ha dañado a nadie

Una de las claves para preparar cualquier prueba académica es descansar las horas adecuadas, ya que tu mente puede estar demasiado cansada como para responder las preguntas, sobretodo en materias que no son tu fuerte.

Muchos pasan días durmiendo sólo unas cuantas horas a base de energéticas, dulces o grandes tazones de café, ya que sienten que deben estudiar en todo momento. Lo ideal es que construyas un horario de estudio, idealmente en las tardes, no más de 3 horas.

6.- Reconocimiento de salas

Algunos piensan que sólo se trata de perder un sábado, pero en realidad sirve para orientarte y no andar perdido en el día D.

No basta con saber en qué establecimiento y sala te toca rendir la prueba, también tienes que saber cómo llegar, cuánto te demoras desde tu casa, cómo llegar a la sala, entre otras cosas. Nunca lo mires como una pérdida de tiempo, sino como una oportunidad para aprender.

7.- Respira, el mundo no se acaba

Cuando debas rendir la PSU tienes que intentar mantenerte calmado, puede que te parezca imposible, pero no dejes que los nervios te dominen porque podrían jugarte una mala pasada. Si es necesario puedes realizar ejercicios de respiración inhalando por la nariz y botando el aire por la boca de manera muy lenta.

No respondas las preguntas inmediatamente, tómate tu tiempo para pensar y verificar que estás marcando en la pregunta correspondiente.

No es necesario que respondas todo en orden. Por ejemplo, en la prueba de lenguaje puedes responder primero las preguntas correspondientes a comprensión de lectura, porque son las que requieren más tiempo y concentración.

8.- Llegó la hora... de postular

Bueno. Ya pasó una parte de este proceso que a veces (o la mayoría de las veces) te resultó horrible. Te entregaron los resultados y es hora de postular a la carrera que deseas estudiar.

Puedes conocer más sobre las universidades y sus mallas de estudio en sus respectivas páginas webs, en donde podrás informarte sobre sus métodos de estudio e incluso enterarte sobre el plantel de docentes y sus respectivos currículums. No postules sin informarte, ya que podrías arrepentirte.

Primero puedes simular tu postulación en un cuaderno antes de realizarlo en la web para evitar errores.

9.- ¡Relájate!

Ya elegiste tu carrera y la universidad en donde quieres estudiar, llegó el momento de lo más importante: Descansar y dejar atrás todo lo estresante que significó este proceso, ya que tendrás que enfrentarte a algo mucho más difícil... Certámenes de final de semestre.