Pensar en rendir la PSU, sumado al buen desempeño escolar, puede ser para muchos jóvenes una carga difícil de llevar, sobre todo pensando que del puntaje obtenido dependerá su futuro laboral. Por ello, una preparación planificada, con tiempo y buenos hábitos de estudio, sin duda alivianarán este crucial proceso.
La psicóloga de la Universidad de Chile Carolina Gutiérrez, sugiere al menos tres meses de anticipación para desarrollar un plan de estudios complementario al horario escolar, sumado a dormir lo necesario para tener un descanso adecuado y no dejar de lado las distracciones como reuniones con amigos por ejemplo.
Otro punto importante, señala, es una actitud positiva frente a la PSU, “no es la última prueba del mundo, ni el último desafío, sino que la puerta de entrada hacia los estudios universitarios”, por lo tanto, mantener la calma y confianza en sí mismo y su preparación son factores relevantes el día de la rendición.
Belén Muñoz Zurita, reciente puntaje nacional en lenguaje, reafirma lo sostenido por la psicóloga, dando cuenta que su experiencia fue dedicar dos horas diarias a estudiar y reforzar las materias de la PSU desde tercero medio, lo que sin duda le dio los resultados esperados y más, siendo su fuerte las ciencias, dedicó mayor tiempo a lenguaje que era donde se sentía más débil y terminó obteniendo puntaje nacional en ello.
La invitación queda abierta a todos los futuros estudiantes que rinden la PSU, aún están a tiempo de implementar correctos hábitos de estudio, escoger un lugar cómodo y con buena iluminación, ejercitar con ensayos, descansar adecuadamente y esperar el gran día.
Imagen CC vía Sourabh