Si desde pequeño(a) creciste rodeado(a) de animales, sueñas con vivir en una gran parcela para tener toda clase de mascotas, entonces no cabe duda que Medicina Veterinaria es tu gran vocación. Toma nota de algunas señales:
1. Siempre llevas alimento de perro contigo, le das de comer a cada perro callejero que encuentras.
2. Curas tú mismo(a) a tu mascota, eres riguroso y sabes cómo aliviar su malestar.
3. Participas siempre activamente en marchas animalistas, no toleras el maltrato animal.
4. Cooperas económicamente con instituciones de ayuda animal, es un deber para ti velar por su calidad de vida.
5. No temes acercarte a ningún animal, los acaricias y entregas cariño a todos. ¡Te encanta compartir con ellos!
6. Todos tus cuadernos tienen animales en sus portadas, siempre, pero siempre.
7. Tu mejor panorama de domingo es ir al zoológico, quedas fascinado(a) con cada especie.
8. No le temes a la sangre ni al ataque de ningún animal, sabes como tratarlos y siempre deseas ayudarlos.
9. Eres una enciclopedia de conocimientos del mundo animal, lo que te pregunten lo sabes.
10. Analizas el comportamiento de tu mascota constantemente, ya sabes como adiestrarlo y entregas tips a tus amistades.
Si ayudar y trabajar por los animales es una constante preocupación en ti, no debes tener duda alguna que la carrera de Medicina Veterinaria, es la profesión indicada para ti. No existe nada que te entregue mayor felicidad y sentido a tu vida.
¡Escucha el llamado de la vocación!
Imagen CC Nkolus